"Nadie te hace nada..."

 

Una mirada profunda te permite comprender que nadie hace nada para herirte, todo tiene que ver contigo, con lo que no conoces de ti, con lo que aún no has integrado en ti...

El mundo, las situaciones, las personas, son un reflejo de tu interior, tanto lo que te gusta como lo que te es más difícil de aceptar….entonces, no te tomes nada “personal”, observa en tu interior qué quiere enseñarte esta situación, que es lo que aún no terminas de integrar en ti.

 

Si es necesario pon un límite o hasta aléjate de la persona o salte de la situación si es muy dura para ti en este momento, pero no dejes pasar la oportunidad de integrar y sacar el aprendizaje de la experiencia, para poder trascenderla. Lo que no comprendas, volverá a repetirse para que puedas integrarlo...

 

La vida es muy simple, no obstante, nuestra personalidad/ego la complica pues vemos el mundo con nuestros propios filtros, interpretamos de acuerdo a nuestro propio sistema de creencias infantil que hemos utilizado gran parte de nuestra vida y está apoyado en nuestra niñez, aprendido cuando no teníamos nuestra Corteza Prefrontal (con la que analizamos, juzgamos, planificamos, etc.) aun desarrollada como para poder entender lo que estábamos viviendo doloroso, quedando heridas sin resolver a nivel emocional en nuestro inconsciente, creencias y decisiones, que siguen afectándonos en nuestra vida de adultos, limitándonos a la hora de expresar la potencialidad que en esencia somos.

 Juana Ma. Martínez Camacho

 

Terapia de Integración Psico-emocional

Te acompaño en el proceso...

algunos de los beneficios: 

 

      ·   Aprender a escuchar el mensaje de las emociones, superando la ansiedad, el miedo, la depresión, la agresividad…

        ·    Sanar  tus patrones tóxicos, tus creencias limitantes, los bloqueos de la niñez que afectan tu vida actual. Te harás de  herramientas sencillas y prácticas para aplicar en tu vida cotidiana.

        ·     Aprender a  descubrir y a satisfacer tus necesidades saludablemente.

        ·     Sentirte  más tranquilo, más seguro de tí mismo, con más confianza en tus recursos internos, más claro y  creativo para poder poner en acción tus proyectos. 

     ·  Mejorar  tus relaciones en general (familiares, pareja, amigos, conocidos…), aprendes a poner límites sanos,  aprendes a conectar con la felicidad interior.

        ·   Comprobar  que las crisis son  verdaderas oportunidades de cambio interior, haciéndote responsable de tí mismo, sin culpar al entorno por lo que te ocurre.

        ·       Aprender a aceptar lo que te está pasando, y desde ahí, poder cambiar tus patrones limitantes, viviendo más relajado, aprendiendo a amarte y respetarte.

       ·    Sentirte más integrado en cuerpo, mente y espíritu, y entender la vida como un proceso de aprendizaje.

         ·         Conectar con tu sentido de vida.

            Conectar con lo que tu eres a nivel esencial